Seguro que la mayoría de los que nos leéis y tocáis el piano, no podéis enfrentaros a determinadas obras o autores porque no os da la apertura de la mano. Este es un problema muy común en los pianistas, ¿entonces por qué no se hacen teclados de piano más pequeños?
Una cuestión de tamaño
Desde hace más de 100 años, los teclados de piano tienen una medida estandarizada. Según este estándar, una octava tiene una medida de unos 16,25 cm. En teoría, un buen pianista con unas manos de tamaño promedio, debería de poder tocar cualquier obra.
¿Es esta teoría realista? Lo cierto es que no. Se estima que un 25% de los hombres y un 85% de las mujeres, tienen las manos demasiado pequeñas como para tocar todo un repertorio clásico. Además, los pianistas con las manos más pequeña tienen mayor tendencia a lesionarse.
Con estos datos en la mano, parece un poco absurdo que haya un único tamaño de teclado y que este resulte tan incómodo para tantos pianistas.
¿A qué se debe este tamaño estándar? Simplemente a una cuestión de ahorro de costes de producción. Una medida estándar se ajusta mucho mejor a la producción en masa.
Otra cuestión es que muchos piensan que sería problemático cambiar de un tamaño a otro.
El estándar DS
Todo comenzó a principio de los 90 cuando David Steinbuhler conoció al pianista Chris Doninson. Este último tenía un viejo piano de la época de los 70 al que había instalado un teclado más pequeño, para poder tocar cualquier obra con sus pequeñas manos.
Steinbuhler se dio cuenta que este mismo problema lo tendrían miles de pianistas en todo el mundo. Así que, juntos, se dedicaron a producir unos teclados diferentes para pianos acústicos.
Tras probar con diferentes tamaños, desarrollaron un nuevo estándar llamado DS (Deninson – Steinbuhler). Este nuevo estándar tenía dos tamaños: DS 5.5 y DS 6.0, frente al teclado común que denominaron DS 6.5.
Estos números detrás de cada DS, hacen referencia a las pulgadas de la octava. Frente a las 6,5 pulgadas del teclado clásico, crearon un tamaño en el que una octava medía 6 pulgadas y otro que medía 5,5. Con estos tres tamaños se pretende cubrir todo el espectro de tamaño de manos de adultos. Además, crearon el DS 5.1, adecuado para niños.
Problemas de tener varios tamaños
El primer problema que nos viene a la cabeza a todos es el siguiente: si esto se instaura, ya no seremos capaces de tocar en cualquier piano. ¿Qué pasará si practico en un teclado con un tamaño y luego tengo que tocar en otro?
Por un lado, desde DS nos cuentan que no es difícil adaptarse (habría que verlo). Ahora nos parece algo muy raro, pero si que es verdad que antes de que se estandarizada esta medida, cada fabricante de piano tenía sus propias medidas de piano y los pianistas podían tocar en todas las marcas sin problema.
Para evitar este problema, se están desarrollando pianos de cola que tengan teclados intercambiables. De esta manera, el pianista podrá instalar fácilmente el teclado que más le convenga.
Por supuesto, esto plantea problemas técnicos. Al introducir un teclado más pequeño, las teclas tienen que estar en un ligero ángulo. Esto traía consigo problemas de tensión, sobre todo en la sección de bajos. Sin embargo, parece ser que tras varios años de desarrollo, han logrado desarrollar teclados DS sin que supongan ningún tipo de degradación en el sonido.
La fundación DS y los pianos Hailun
Recientemente, los teclados DS se han refundado como una organización sin ánimo de lucro: The DS Standard Fundation. Su objetivo es lograr extender este nuevo estándar por todo el mundo.
The DS Standard Fundation se dedica a construir teclados con tamaños alternativos y se los presta a instituciones musicales de todo tipo. A día de hoy, ya hay teclados DS en más de 200 por el mundo, la mayoría en universidades de EEUU.
Ya han conseguido que este año, el Concurso Internacional de Piano de Dallas sea el primero que dejará elegir a sus participantes el estándar de teclado DS que quieran.
En la última NAMM celebrada a principios de 2020, la marca Hailun presentaba su modelo Hailun HU-1P. Se trata de un piano vertical de 48 pulgadas que permite intercambiar el tamaño de su teclado.
The DS Standard Fundation pretende que, poco a poco, haya más marcas que incorporen sus teclados intercambiables. Quién sabe, a lo mejor dentro de poco, todos podemos sentirnos como si tuviéramos las manos más grandes.
Me ha parecido un articulo estupendo, muchas gracias. Yo he experimentado el problema de la diferencia del tamaño de teclas, ya que pese a mis 72 años decidí aprender a tocar piano; comencé a tomar clases y de seguido compré un piano-teclado que tuviese una buena relacion calidad precio y un tamaño que cupiese en mi abarrotado despacho, ya que sin ello poco o nada se puede conseguir, pero el problema vino cuando en clase aprendia con un piano y en casa practicaba con mi ‘otro’ piano; la diferencia de tamaño de los teclados me está demostrando que determinadas automaticaciones que practico con el teclado luego no me salen bien en el piano y viceversa…
Personalmente no creo que sea tan importante la sensitividad de las teclas como su tamaño, y sin embargo los fabricantes y vendedores de teclados de iniciación ‘serios’ alardean mucho de lo primero mientras no informan o se callan lo segundo.
Como guitarrista de manos pequeñas, he podido comprobar como el tamaño de la guitarra importa mucho, tanto de niño (ya sean de 1/2, 3/4) como de adulto (parlor, española, OM, jumbo, acorazado, etc…) y en el 99% de los casos es el principal motivo de abandono de los alumnos.
Tambien espeluzno cuando a un niño de 4 o 5 años, no solo se le enseña en un piano de tamaño estandar, sino que se recomienda a sus padres la compra de ese mismo tamaño para la práctica del niño en casa
Buenos días Eugenio, muchas gracias por tu opinión.
El problema que comentas es bastante común. Una persona que comienza a tomar clases de piano, prefiere comprar un teclado por cuestiones de tamaño y precio, pero los teclados tienen tantas características a tener en cuenta que, muchas veces, se hace la compra equivocada. Y las características son tantas y tan diferentes, porque los músicos pueden tener necesidades muy específicas.
Lo que mencionas de la sensitividad de las teclas no es exactamente así. La sensitividad de una tecla se refiere a que cuanto más fuerte la presiones, más suena. Sin embargo, la tecla sensitiva puede seguir siendo blanda. Lo importante a la hora de comprar un teclado que emule la sensación de un piano es que la tecla esté contrapesada.
Comprendo lo que comentas del tamaño de las guitarras. Pasa lo mismo con otros instrumentos como los violines y demás. Sin embargo esto no aplica al piano. Un piano no hay que abrazarlo o sujetarlo como otros instrumentos, por lo que no tiene que suponer una incomodidad al niño. Simplemente se le enseñarán pasajes acordes al tamaño de su mano. El segundo motivo es económico. Un piano acústico es muy costoso y para unos padres sería muy difícil ir comprando pianos a medida que el niño crece.
En las gaitas, por ejemplo, sucede una problemática similar a la del piano con respecto a los tamaños. Una gaita tiene el tamaño que tiene y la separación entre los orificios de las notas, en función de la tonalidad que tenga. No del tamaño para el aprendiz. Si la gaita es pequeña será porque la tonalidad es más aguda. Pero si la tonalidad en la que tiene que tocar es más grave, la gaita será más grande. Y esto es algo que no se puede cambiar. Es como si el niño quiere aprender a tocar la tuba, o un bombo.