El dominio de los planos sonoros es fundamental para lograr una interpretación al piano que transmita de verdad.
¿Alguna vez te ha pasado que escuchaste una canción al piano, técnicamente solvente, pero que no te transmite nada?. Eso es, probablemente, porque la interpretación es «plana». Esto es, que todas las notas mantienen una intensidad similar. El resultado es una interpretación sin sentimiento.
Suele decirse que la música es emoción. Por eso, cuando interpretamos alguna obra, debemos pensar que tiene corazón y debemos visualizarla como si de un cardiograma se tratase. Si te conectan a un cardiograma y el monitor muestra una línea plana, es que estás muerto. Lo mismo pasa con cualquier obra, tiene que tener latidos más o menos intensos en función de la intención del compositor. Conseguir eso es manejar los planos sonoros y tener un buen dominio de tus dedos y del sonido que logran hacer al ponerse en contacto con las teclas.
Por supuesto, manejar los planos sonoros no es sencillo y requiere mucha práctica. Hoy os traemos una serie de ejercicios para empezar a dominar los planos sonoros. Son bastantes y, aunque la mayoría parecen sencillos, llegar a hacerlos rápido pero dominando cada dedo y cuidando el sonido, cuesta lo suyo.
Todos estos ejercicios están sacados del Schimdt, un libro que tenemos de cabecera y que recomendamos cada vez que alguien nos pregunta por un manual técnico de piano. Lo hacemos porque, además de ser un libro muy completo, con cientos de ejercicios, resulta muy barato (menos de 7€).
De todas formas, si no puedes hacerte con él, aquí te dejamos las transcripciones de algunos de los ejercicios que mencionamos en el vídeo.
Ejercicios con una sola nota tenida en cada mano:
Ejercicios de dos notas tenidas en cada mano:
Ejercicios de notas dobles mientras se mantiene una nota en cada mano:
Ejercicio de Trinos con los dedos 5 y 4 en la derecha y con 2 notas tenidas:
Ejercicio de Trinos con los dedos 4 y 5 en la izquierda y 2 notas tenidas:
Ahora ya lo tienes todo para empezar a dominar los planos sonoros. Solo te queda practicar. Recuerda que esta técnica es especialmente útil para afrontar obras polifónicas y repertorio barroco, aunque te puedes encontrar pasajes con elementos de este tipo en obras de casi cualquier estilo y/o época musical.