Muchas veces, nuestros alumnos de piano se desmotivan ante tanta técnica: colocación de manos, independencia, control de los dedos… Hoy traemos la que, quizá, sea la canción más fácil del mundo. El Divertimento Staccato puede tocarse con solo dos dedos. Es una canción ideal para los que acaban de empezar en el maravilloso mundo del piano. Además de motivar a tus alumnos, servirá para que desarrollen coordinación entre sus manos, la velocidad progresiva y el sentido del ritmo.
Este tema es una canción popular, de autor desconocido, pero que hemos sacado de una colección de libros para aprender a tocar el piano, muy utilizada en casi todos los conservatorios europeos: el método de Tchokov–Gemiu.
Para tocar la canción, es muy importante tener en cuenta las articulaciones. Como su nombre indica, las figuras no se tocan ligadas, sino en staccato. Esto significa que las negras irían separadas por un silencio imaginario. Por supuesto, esto no se le exigirá al alumno de manera consciente, pero la propia escritura de la canción (con notas repetidas) favorecerá su correcta ejecución.
La partitura en el libro de Gemiu, incluye un acompañamiento que podrá realizar alguien que domine mejor el piano (profesor, familiar, etc), creando una pieza a cuatro manos muy lucida. Además, siempre es más divertido tocar el grupo.
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