Otra triste noticia para el mundo del piano y de la música. Ayer falleció el pianista, compositor y director de orquesta Michael Gielen a los 91 años de edad. Atrás deja una larguísima carrera marcada por la música moderna y de vanguardia. El maestro ya se había obligado a dejar de dirigir en 2014, por motivos de salud.
Nacido en Dresde, Alemania, en 1927, pronto se vio obligado a emigrar a Argentina para huir de los nazis. Su padre Josef, fue director del Teatro Real de Viena y, más tarde, trabajó en el Teatro Colón de Buenos Aires. Fue aquí donde su hijo, Gielen, recibió clases de composición y dirección de diversos músicos exiliados.
Con solo 22 años, sorprendió al mundo al presentar toda la obra de piano de Arnold Schönberg, exponente de la música atonal.
Tras trabajar como maestro repetidor en el Colón, Gielen volvió a Europa donde actuó durante una década en la Ópera de Viena.
Se estableció como especialista en música moderna y su carrera lo llevó a actuar en las principales ciudades europeas: Bélgica, Suecia, Holanda, Alemania y Reino Unido. También fue el director jefe de la Ópera de Frankfurt durante diez años, además de director invitado de la Orquesta Sinfónica de la BBC de Londres.
Como compositor, Gielen siguió la tradición de la Segunda Escuela de Viena y su pequeña obra incluye adaptaciones de poemas de Hans Arp, Paul Claudel, Stefan George y Pablo Neruda.
A lo largo de su carrera recibió una gran cantidad de premios musicales como el Theodor W. Adorno (1987) o el Ernst von Siemens Music Price (2010), además de reconocimientos del gobierno alemán y austriaco.
Cada vez que se va un gran maestro, la música pierde una gran piedra de apoyo. Por suerte, nos seguirá quedando su música.
Si quieres escuchar algún trabajo de Michael Gielen, aquí te dejamos un enlace.