El próximo mes de diciembre se subastarán dos pianos de cola que seguramente adquieran cifras muy elevadas. No tanto por el valor que tienen como instrumento musical sino por haber sido tocados por músicos que han pasado a formar parte de la historia de la música rock.
Layla.
El primero de los pianos que se subastan es conocido como Layla. Se trata de un piano de cola marca Baldwin construido en 1929 y que pasó unos 40 años en los famosos Criteria Studio de Miami. Desde que llegó a los estudios en los años 60, con él se grabaron discos icónicos como Eat a Peach de Allman Brothers, Don’t Play that Song de Aretha Franklin, Saturday Night Fever de los Bee Gees, Street Survivor de Lynyrd Skynyrd y Layla de Derek and the Dominos. Además, en los estudios tienen registros de que este piano también lo tocaron importantes pianistas como Ray Charles, aunque no grabasen directamente con él. En los años 70 y 80 el piano Layla tenía tan buena fama y se hablaba tan bien de él que productores como Tom Dowd afirmaban que era su piano de grabación favorito del mundo.
En el año 1998, Hit Factory compró los estudios Criteria, por lo que su fundador Ed Germano obtuvo la posesión de este piano tan especial. Tras su muerte, su hija Danielle lo heredó y se convirtió en su propietaria y actual vendedora.
Los subastadores (empresa Eaton & Bressan, de EEUU) aseguran que Layla se encuentra en perfecto estado de funcionamiento y que conserva todavía su clásico y rico sonido. Eso sí, debido a su ajetreada vida, su mueble está bastante rayado.
De cara a la subasta, junto con el piano se incluirá un panel enmarcado en el que se muestra la portada del álbum Layla, copias de las hojas de las pistas de las sesiones, fotografías de las sesiones y un álbum original de Layla firmado por Tom Dowd. Por si esto fuera poco, también se incluirá el premio de ventas Platino de la RIAA original de Layla otorgado a Criteria Recording Studios. Esto sin duda, hará que los precios de las pujas suban como la espuma. Si quieres, tú también puedes hacer tu puja hasta el día 4 de diciembre en este enlace.
Fleetwood Mac.
El segundo piano de cola que se subasta es de la marca Hamilton y su número de serie es el 91477. Por si no lo sabes, la Hamilton Piano Company formaba parte de la conocida marca Baldwin Pianos. De hecho, el segundo nombre del fundador de Baldwin era Hamilton. Por esta razón, este piano se fabricó igual que Layla en una de las fábricas de Baldwin en los años 20.
Pero lo que lo hace especial es que este piano pertenecía nada más y nada menos que a Stevie Nicks. Luego, pasó por las manos de Christine McVie, quien lo utilizó para componer varios temas de Fleetwood Mac, como Songbird (Rumours, álbum de 1977) o Sara (Tusk, álbum de 1979). Sin embargo, la lista de famosos que tocaron este piano no termina ahí. A lo largo de los años también lo han tocado estrellas como Freddie Mercury y Elton John. Por eso, vamos a ver su historia más detenidamente.
En los años 70, Stevie Nicks tenía el piano en su casa y con él compuso la mayoría de sus canciones. En 1979 se llevaron el piano para que estuviese en todos los conciertos de la gira Fleetwood Mac. En estos conciertos era McVie quien lo tocaba y la banda siguió utilizándolo en los escenarios hasta el año 1983.
Robbie Patton, un amigo de Nicks, fue quien escribió la canción Hold Me del álbum Mirage de Fleetwood Mac, de 1982. Como pago, en vez de dinero, le dijo a su amiga que prefería quedarse con ese piano porque le encantaba el sonido. Y ella aceptó. Como Patton trabajó posteriormente con innumerables artistas de fama mundial y tenía este piano en su estudio, podemos saber que Freddie Mercury y Elton John lo tocaron.
El piano de Stevie Nicks/Fleetwood Mac se subastará en Gotta Have Rock and Roll a nombre de Robbie Patton. Con él se incluye una carta de autenticidad escrita 2015 y firmada por Nicks, McVie y Patton. Su actual dueño asegura que está en perfecto estado y que todas sus clavijas y mecanismos son los originales. Sí que es cierto que en alguna ocasión por motivo de las giras, necesitó algunas reparaciones, pero sus piezas principales siguen siendo las originales. En este caso, se admitirán pujas hasta el día 6 de diciembre de 2024.
La verdad, que de tener el dinero suficiente, nosotros no tendríamos claro por cuál de ellos pujar. Al final, si lo piensas, son dos pianos salidos de la misma fábrica, prácticamente en el mismo año, y que llevaron una vida muy parecida. ¿Tú cuál preferirías? ¿El que se fue de gira o el que estuvo en los estudios? Si es por valor a nivel historia, probablemente se valore más el segundo, pero si es pensando en el bienestar del piano, podría estar mejor el que permaneció años quieto en un estudio. Sin duda, está difícil escoger.